Acelerador lineal
Un acelerador lineal (linac) es un sofisticado dispositivo médico ampliamente utilizado en radioterapia para administrar rayos X de alta energía o haces de electrones para el tratamiento del cáncer y de ciertas enfermedades no cancerosas. Desempeña un papel crucial en la administración precisa y selectiva de radiación a los tumores sin afectar a los tejidos sanos circundantes.
Un linac consta de varios componentes: un cañón de electrones de alta energía o una fuente de rayos X, una guía de ondas del acelerador lineal y un cabezal de tratamiento. El linac produce y acelera electrones o rayos X a altas energías, lo que les permite penetrar en el cuerpo del paciente y depositar energía en la zona objetivo. La energía y la intensidad del haz de radiación pueden controlarse con precisión y personalizarse en función de las necesidades específicas del tratamiento.
Durante la radioterapia, el linac administra los haces de radiación al paciente con gran precisión, siguiendo un plan de tratamiento prescrito y desarrollado por un oncólogo radioterapeuta. Técnicas avanzadas como la radioterapia de intensidad modulada (IMRT) y la radiocirugía estereotáctica (SRS) utilizan las capacidades de un linac para administrar dosis de radiación altamente conformadas y precisas a los tumores, maximizando la eficacia del tratamiento y minimizando el daño a los tejidos sanos.
Los Linac están equipados con sofisticados sistemas de obtención de imágenes, como la tomografía computarizada de haz cónico (CBCT), que permite visualizar con precisión el tumor y la anatomía circundante antes y durante el tratamiento. Esto mejora la precisión del tratamiento al permitir la radioterapia guiada por imágenes (IGRT), en la que se puede verificar la posición del tumor y realizar los ajustes necesarios.
El funcionamiento y mantenimiento de un linac requiere un equipo altamente cualificado de físicos médicos, oncólogos radioterapeutas y radioterapeutas. Se aplican estrictos protocolos de garantía y control de calidad para garantizar que el rendimiento del linac se supervisa y calibra periódicamente, manteniendo así los más altos niveles de precisión en el tratamiento y seguridad del paciente.
En general, los aceleradores lineales han revolucionado la radioterapia al permitir la administración precisa y selectiva de la radiación, mejorar los resultados del tratamiento y aumentar la calidad de vida de los pacientes sometidos a radioterapia.